martes, 4 de febrero de 2014

39854 comillas

Mientras se me arruga el alma,
mientras se me turba el pensamiento,
preciso tu ausencia, presencio tus vasos vacíos
mientras me expulsas de tu ser...
mientras me dejas sin mañana.

Mientras tu soledad mata
mientras estás tú tan vivo,
puedo reconocer mi alma herida
y lanzarme al vacío...
sin tocar fondo, sin perseguir un camino
solo lanzarme al vacío...

Ver más allá de la luna
y encontrarme desnuda
al fin encontrarme...
encontrarme en la luna...

No preocuparme del amor pasado
ni del desamor vivido,
encontrarme sin culpa
y ver quien he sido.

Y preciso tu ausencia
y presencio el vacío
y escucho tu silencio
que me lleva al abismo
y me encuentro en la luna
y luego desvarío
y luego me pierdo
y preciso tu ausencia y presencio el vacío
y así... 39854 veces después
pasa mi día precisando tu amor y presenciando el vacío.  

martes, 28 de enero de 2014

Me Quedó Grande el Título

Quise ser Luna,
ser killa y brillar
quise ser Diosa,
y por lo alto volar,
quise ser mar y
ser obscuridad
para contigo estar.

Quise ser lluvia
y quise ser aire,
quise ser un poema,
quise ser inmortal,
solo quise interesarte
y no lo pude lograr.

Comprendí entonces,
que soy quien debo ser,
que soy una mortal,
que me equivoco como los demás
que soy testaruda,
que soy inmoral,
que soy una sombra
que soy liberal,
que estoy loca
y eso que más da.
que soy obsesiva y
contigo me quería quedar
que soy una artista y
que nadie me lo va a arrebatar
que soy más que un título que me quisiste otorgar
que tal vez me quedó grande,
que soy algo más.

Que soy más que
una maligna inspiración,
que soy más que una visión fugaz,
que soy un color con libertad,
que soy una voz que no se callará,
que soy el miedo que nunca pudiste enfrentar.
y ahora soy el adiós que tu vida marcará.

Desde tu obscura cabellera hasta el brillante rocío de tu éxtasis

Ella miró a través de sus ojos, no era la misma mirada, no era la mirada de la que se enamoró, tenia equivocaciones, tenía miedos, tenía el alma rota y él la rechazó. Con desprecio la miró, con groserías la echó, tal vez fue ella quien se equivocó, pero fue él quien la rompió.
Volvió cada día para resucitar su amor y aunque creyó que lo había logrado, un día la mirada de nuevo apareció, la mirada fría, la mirada profunda y sin luz esa mirada que no podía soportar... 
Día tras día ella lloró, su alma estaba herida al igual que su amor. Ella, Él, ambos adictos al sufrimiento, adictos al dolor y trágicamente unidos por la pasión.
Tan solo quería una palabra, un abrazo, una frase que nunca llegó de esos labios, pero si de otros, de cualquier otros... entonces decidió, no por ambos sino, por su propio amor, por ser quien era, por ser libre, por tratar de sentir lo que nunca sintió, mientras él nunca olvidó, ella nunca se perdonó... hoy viven eternamente lejos unidos por un te extraño separados por un adiós, separados por la inmadurez que los guió, separados por un perdón sin corazón, separados por huecos irreversibles hechos en el alma de cada uno, separados para siempre aunque etéreamente juntos unidos por la incomprensión, unidos por el desamor, por el rencor, por todo menor por amor...